La Asociación Marianista de Acción Social (AMAS) y representantes de organizaciones amázonicas, dieron inicio a la Semana Internacional de la Vigilancia Indígena (del 24 al 28 de octubre) al respaldar el proyecto de ley que pretende reconocer la labor de los monitores ambientales de los recursos hídricos.
En el marco de este evento, las organizaciones indígenas y vigilantes desde distintas partes del Perú, compartirán sus experiencias de sistemas de vigilancia y monitoreo ambiental, de los impactos negativos producto de los desastres ambientales, así como de las actividades extractivas que se desarrollan en sus zonas.
Desde la RED MUQUI, se hizo extensiva la invitacion para que los legisladores conozcan cómo es que las comunidades se organizan para cuidar la calidad del agua de sus ríos y los resultados que han venido obteniendo en los últimos 12 años en la sierra de la región La Libertad.
“Es necesario involucrar a los más de treinta comités de vigilancia ambiental que se encuentran en nuestra sierra a nivel nacional, ya que son poblaciones que se vienen empoderando en el monitoreo ambiental tras varias capacitaciones y talleres que siguen para mejorar su labor”, señaló Ronal Gabriel (AMAS).
Por su parte el congresista por el Frente Amplio, Oracio Pacori, recordó que esta iniciativa legislativa es resultado de más de dos años de trabajo participativo entre las organizaciones indígenas y organizaciones de sociedad civil, que impartió una serie de talleres, capacitaciones y salidas de campo. Remarcó que existió un proyecto de ley similar que fue revisado por diversos ministerios y órganos adscritos de los sectores Ambiente, Agricultura, quienes presentaron recomendaciones de mejora, a excepción del Ministerio de Energía y Minas (MEM) que mostró rechazo por la iniciativa.
“Desde hace 10 años existe una demanda por reconocer la vigilancia y monitoreo ambiental. Los pueblos indígenas conocen, gestionan y protegen sus territorios. Además existe un trabajo sostenido y desarrollado por los monitores comunitarios que pueden identificar impactos ambientales”, resaltó.
Finalidad
La vigilancia y monitoreo socioambiental indígena y ciudadano, tiene el potencial de prevenir conflictos socioambientales a través de la instauración de un diálogo directo e institucionalizado entre el Estado y las organizaciones representativas de la población local.
De igual manera, ayudaría a mejorar y fortalecer el sistema nacional de gestión ambiental aportándole mayor información sobre la realidad del campo y alertando de forma temprana acerca de potenciales desastres ambientales. Al prevenir estos desastres, también se generaría un ahorro importante en términos, por ejemplo, de remediación y salud pública.
Desde siempre, los pueblos indígenas y poblaciones locales vienen realizando labores de vigilancia, la cual se presenta como una estrategia de gestión territorial, ambiental y social en zonas remotas de nuestro país, donde muchas veces el Estado no está presente.
En definitiva, este proyecto de ley propone recoger una labor que ya se viene realizando desde los pueblos indígenas y poblaciones locales, reconociéndola e institucionalizándola para permitirle aportar y mejorar la gestión territorial, ambiental y social en nuestro país.
Los congresistas del Frente Amplio, Oracio Pacori y Tania Pariona, expusieron la finalidad de la propuesta legislativa (N° 336/2016-CR) para la ARTICULACIÓN DE LA VIGILANCIA Y MONITOREO SOCIO-AMBIENTAL CIUDADANO E INDÍGENA EN EL SISTEMA DE GESTIÓN AMBIENTAL para mejorar la gestión territorial y ambiental en el Perú.
Ahora se espera que este proyecto de ley -ingresado el 29 de setiembre- sea discutido próximamente en la Comisión de Pueblos Andinos, Amazónicos y Afroperuanos, Ambiente y Ecología (CPAAAE), presidida por la congresista María Elena Foronda, quien además es la autora de la propuesta.
Estas experiencias y ventajas ubicadas a lo largo del territorio nacional, se reunirán del 24 al 28 de octubre en la SEMANA DE LA VIGILANCIA INDÍGENA.
Organizaciones que apoyan y aportaron en la propuesta:
RED MUQUI a través de sus instituciones miembro que trabajan experiencias de monitoreo ambiental como AMAS (La Libertad), Grufides (Cajamarca) y Derechos Humanos Sin Fronteras (Cusco); AIDESEP, sus bases regionales y federaciones como Organización Regional AIDESEP Ucayali – ORAU; la Asociación Cocama de Desarrollo y Conservación San Pablo de Tipishca – ACODECOSPAT (Loreto); Consejo Machiguenga del Río Urubamba – COMARU (Cusco); y la Central Asháninka del Río Ene – CARE (Junín), Organizaciones Indígenas que conforman el Pacto de Unidad como ONAMIAP y CNA.