Redacción DHSF
En el reporte denominado ¿Qué pasó con ellas?, la Defensoría del Pueblo informó que, en la región del Cusco, se registraron 9 mujeres adultas y 18 niñas y adolescentes desaparecidas en marzo, un mes marcado por la contienda electoral.
A nivel nacional, la cifra es mayor: 542 niñas, adolescentes y adultas mujeres fueron reportadas como desaparecidas. De este total, se registraron 341 niñas y adolescentes y 201 adultas. Asimismo, en comparación con el registro de notas de alerta del mes de febrero se hay un incrementa del 27 %.
Mientras que, en Cusco, hay 13 y 26 mujeres adultas, niñas y adolescentes reportadas como desaparecidas en los meses de enero y febrero, respectivamente. Asimismo, según dicha entidad, en lo que va del año, a nivel nacional ya son 1425 los casos registrados a través de notas de alerta en la página web de la Policía Nacional del Perú (PNP).
Por otro lado, la cantidad de denuncias reportadas en el Sistema Informático de Denuncias Policiales (SIDPOL) de personas desaparecidas en el mes de marzo suman un total de 1741, de las cuales 616 son mujeres y 38 son de la región del Cusco.
Para Kathe Soto, activista y fundadora de Mujeres Desaparecidas Perú, “existe la necesidad de un protocolo con enfoque de género e interculturalidad. Y necesitamos instrumentos que puedan visibilizar la realidad y construir canales no sólo tecnológicos, sino canales cercanos para que la ciudadanía pueda prevenir”.
Recordemos que, el 15 de octubre, el Estado peruano implementó el Sistema Nacional de Búsqueda de Personas Desaparecidas en Cumplimiento del Decreto Legislativo N° 1428 que desarrolla medidas para la atención de casos de desaparición de personas en situación de vulnerabilidad.
Dicho sitio, web (https://desaparecidosenperu.policia.gob.pe/) cuenta con una sección de alerta de emergencia por desaparición de niñas, niños, adolescentes y mujeres víctimas de violencia, una base de datos de personas desaparecidas de 0 a 18 años y de 18 años a más y una lista de personas ubicadas e información respecto a los procedimientos para reportar una desaparición.
El Estado debe implementar políticas de prevención cada vez más eficaces para una atención adecuada a las víctimas. Además, en plena segunda vuelta electoral, los candidatos tienen que considerar esta problemática como parte de sus planes de gobierno. Se tiene que reconocer que las víctimas están expuestas a otras formas de violencia y la edad, el género, la situación socioeconómica y la condición racial pueden ser factores determinantes.
