Yulissa Casana Muñoz – área de Comunicación, Incidencia y Género
A propósito del mes del Día Internacional de la Mujer, ¿cuál es la responsabilidad de los medios de comunicación con la igualdad de género?
El periodismo es pasión y a la vez es compromiso con la justicia social. En plena era digital, la actualización e inmediatez juegan un papel importante en la difusión de noticias en el menor tiempo posible. Sin embargo, en el camino existen vacíos que hacen difícil realizar un tratamiento informativo adecuado en ciertas noticias que involucran la dignidad de las personas.
Por ejemplo, los mensajes informativos sobre violencia de género suelen contextualizar un espectáculo y no una problemática social. A través del lenguaje y las imágenes, se legitiman patrones socioculturales, se construyen imaginarios sociales y opinión que contribuyen a una normalización de la desigualdad entre géneros.
La mayoría de los casos de violencia sexual, acoso, feminicidio, entre otros, son tratados como hechos aislados pese a que son la expresión de un sistema que vulnera los derechos de las mujeres de forma cotidiana. Hace unas semanas la policía capturó a un hombre acusado de feminicidio y secuestro al que apodaron «Monstruo de Urubamba”. La prensa inmediatamente informó sobre lo sucedido sin detenerse a reflexionar. Inconscientemente, presentó al sujeto en la noticia como un inadaptado cuando bien sabemos que los agresores viven en la propia casa de la víctima; son el familiar, el vecino, el profesor, el amigo que actúa con impunidad. No hay que caer en el sensacionalismo ya que las noticias son la representación mediática de la realidad.
También muchas veces los medios de comunicación revictimizan a las mujeres a través de imágenes y la descripción de los hechos que las ponen en una posición más vulnerable al dudar de su testimonio y culpabilizarlas; al difundir datos privados y exponer a sus familiares. Es necesario crear mensajes considerando el impacto diferenciado que genera un mismo hecho en los hombres y las mujeres. A menudo se estigmatiza a la víctima, más aún cuando se trata de la comunidad LGTBIQ invisibilizada tanto en los medios de comunicación como en la sociedad peruana.
En ese sentido, urge informar desde una perspectiva de género, la cual es una herramienta analítica y metodológica que contribuye a las relaciones de género equitativas y justas y reconoce la existencia de otras discriminaciones y desigualdades derivadas del origen étnico, social, orientación sexual, identidad de género, edad, entre otros [1].
Las noticias deben ser abordadas en búsqueda de la igualdad; no para promover prejuicios que afirmen actitudes discriminatorias por género. Esto significa despertar interés en la opinión pública sobre este tema, generar debates, visibilizar situaciones de violación de los derechos fundamentales y alternativas a la problemática. Además de realizar un tratamiento informativo más crítico a las relaciones de poder y desigualdad, incluir a las diversidades, seleccionar fuentes de igual número de mujeres y varones para favorecer la pluralidad de representaciones, usar un lenguaje inclusivo y evitar difundir imágenes que sexualicen y/o cosifiquen a las mujeres [2].
No hay única regla para comunicar con enfoque de género. Hay distintas pautas que apuestan por el cambio de patrones socioculturales reproductores de la desigualdad. Esto se ha convertido en una demanda social generada por la nueva ola del feminismo que va más allá del tratamiento informativo en casos de violencia de género.
Si bien el Perú tiene avances a favor de la igualdad de género, todavía hay un largo camino por recorrer para alcanzar las metas del quinto objetivo de desarrollo sostenible (igualdad de género). Tampoco se trata de responsabilizar a las/los periodistas de lo que sucede, pero -en aras de la verdad- ejercen influencia en diferentes grados. El desafío por hacer un buen periodismo es grande. Actuemos con mayor responsabilidad y compromiso. No hay duda que el periodismo puede ser la más noble de las profesiones o el más vil de los oficios, tal como lo dijo alguna vez Luis Miró Quesada.
Fuentes bibliográficas
[1] Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (2014). Conceptos Fundamentales para la Transversalización del Enfoque de Género. Recuperado de https://www.mimp.gob.pe/files/direcciones/dcteg/Folleto-Conceptos-Fundamentos-en%20TEG_MIMP-DGTEG-DASI.pdf
[2] Alberti Garfias, Gloria, Lagos Lira, Claudia, Maluenda Merino, María Teresa y Uranga Harboe, Victoria (2010). Por un periodismo no sexista: pautas para comunicar desde una perspectiva de género en Chile. Recuperado de https://unesdoc.unesco.org/ark:/48223/pf0000190143