Redacción DHSF
Los gremios de Espinar enviarán un memorial al Ejecutivo nacional en los próximos días. La población demanda, entre otras cosas, la implementación de un proceso de consulta previa vinculante para continuar con el proyecto minero Expansión Tintaya Integración Coroccohuayco (ampliación de la compañía minera Antapaccay).
El presidente del Consejo de Ministros (PCM), Guido Bellido Ugarte, viajó y desactivó ayer el conflicto social de las comunidades campesinas de la provincia de Chumbivilcas, en el Cusco, que protestaban contra la minera MMG Las Bambas y el Ejecutivo nacional por el uso de manera inconsulta de sus tierras comunales para el corredor minero del sur.
Las comunidades originarias de la provincia cusqueña de Espinar, vecina de Chumbivilcas y que también forma parte de este corredor vial, acordaron en una asamblea multicomunal exigir al primer ministro Bellido y al presidente de la República, Pedro Castillo Terrones, un trato igualitario en la atención de sus demandas.
En ese sentido, solicitan que se conforme una mesa de diálogo para atender la problemática socioambiental de esta provincia que se arrastra desde hace casi cuatro décadas.
Las comunidades originarias enviarán al primer ministro, Guido Bellido, y al ministro de Energía y Minas, Iván Merino Aguirre, un memorial en el que pedirán que se instale una mesa de negociaciones en el más breve plazo. El documento está siendo elaborado.
«No vamos a presionar, porque el gobierno recién está empezando. Queremos que haya un gesto y un compromiso para atender nuestra agenda que quedó suspendida en el anterior gobierno», dijo Vidal Merma, líder social y exdirigente de la Asociación de Urbanizaciones y Pueblos Jóvenes de Espinar (Aupe).
Según las organizaciones sociales de base de Espinar, la empresa minera Antapaccay ha vulnerado sistemáticamente sus derechos y ha afectado la salud de las personas.
Agregan que las comunidades originarias deben hacer frente al despojo de sus tierras, la destrucción de fuentes de agua y el medio ambiente y el daño a la salud con metales pesados.
Merma señaló que hay la necesidad de esperar que el gobierno termine de instalarse y, a partir de allí, reinstalar la mesa de diálogo que quedó paralizada durante el gobierno del expresidente Francisco Sagasti.
LA AGENDA DE ESPINAR
La provincia de Espinar arrastra una agenda desatendida por los sucesivos gobiernos y la minera Antapaccay que consta en cinco puntos principales.
La más importante consiste en la implementación de un proceso de consulta previa vinculante para continuar con el proyecto minero Expansión Tintaya Integración Coroccohuayco, que es la extensión de las operaciones de la compañía minera.
Asimismo, piden que el Estado cumpla con implementar el Fondo de Emergencia Social para atender las comunidades afectadas.
La tercera deuda tiene que ver con retomar la suspendida implementación de un plan de reparaciones por los daños causados en territorios comunales por la operación minera.
Y los dos últimos puntos consideran el reclamo de un programa de reactivación económica para las comunidades originarias y la creación del canon comunal para garantizar que esos recursos lleguen a las comunidades.
