Por: Blga. Karem Luque – Coordinadora de la Mesa Técnica de Salud Ambiental y Humana
Cada 13 de diciembre se recuerda el Día Nacional de la Acción Frente a la Contaminación por Sustancias Químicas, el objetivo de este día es generar conciencia en la ciudadanía sobre el uso de sustancias sintéticas en la agricultura, esto a través de fertilizantes, plaguicidas y productos farmacéuticos. Sin embargo, desde hace varios años se ha estado visibilizando los grandes e irreversibles daños al medio ambiente y la salud que viene generado las actividades extractivas en nuestro país, principalmente en zonas aledañas a estos proyectos. La data indica que existen al menos 9 mil pasivos ambientales en el país[1] y durante los últimos 20 años se han dado alrededor de 500 derrames de petróleo en nuestra Amazonía.
El riesgo de contaminación en estos territorios es permanente, debido a que hay una débil aplicación de nuestras políticas ambientales en materia de protección y fiscalización, además no hay medidas que identifiquen y sancionen a los responsables de los daños ambientales generados por sustancias químicas, al respecto al año 2015 de 8616 pasivos ambientales mineros 7531 (86%) carecían de estudios ambientales y por lo tanto no se tenían identificados a los responsables. Por ejemplo, hace 21 años ocurrió un derrame de mercurio en Choropampa Cajamarca, siendo una de las zonas más afectadas, dos décadas después las personas afectadas por el metal tóxico no son atendidas a su salud totalmente, prácticamente se encuentran abandonados.
Toda esta problemática ambiental también ha sido reflejada por casos emblemáticos como Cerro de Pasco, La Oroya, Espinar, Puno, Cuninico, entre otras zonas. Es por ello que, desde el 2017 se ha constituido una Plataforma Nacional de Afectados por metales, metaloides y otras sustancias químicas tóxicas, quienes vienen visibilizando el abandono del Estado que sólo ve sus territorios como zonas de “reactivación económica” pero con poca voluntad para atender los impactos a la salud generada por la exposición a estos metales tóxicos. Lamentablemente las empresas mineras e hidrocarburíferas han mostrado poca “empatía” para asumir sus responsabilidades y sólo buscan evadirlas con mensajes vacíos de que “aportan al desarrollo del país” con poca transparencia para reconocer y contribuir en la atención y reparación del daño generada por sus actividades.
Por ello creemos que las acciones para frenar la contaminación de sustancias químicas tóxicas tienen que pasar de ser sólo una “fecha simbólica” a acciones reales, y es lo que piden las poblaciones afectadas, es por ello que, a través de su persistencia y constante lucha se ha logrado construir un Plan Especial Multisectorial para que con un enfoque integral se proponga los lineamientos y mecanismos que atiendan el problema ambiental – salud – saneamiento[2]; asimismo, han contribuido e incidido para la aprobación de la ley N° 31189, Ley para fortalecer la prevención, mitigación y atención de la salud afectada por la contaminación con metales pesados y otras sustancias químicas; finalmente, han logrado a través del legislativo impulsar por primera vez un incremento de presupuesto de más de 50 millones de soles que pueda contribuir en la atención de personas afectadas por metales tóxicos[3].
El 2021 cierra con algunos avances para promover una acción contra la contaminación por sustancias tóxicas, sin embargo, se requiere reforzar la implementación de políticas publicas efectivas en materia ambiental, abastecer de agua segura para el consumo humano, atender idóneamente a la población afectada por metales tóxicos. Se requiere construir un equilibrio ecológico que no someta a las poblaciones al daño a su salud que posteriormente, será difícil de revertir. En suma, las y los afectados esperan que sean tratados como ciudadanos con derechos y no solo como el costo – sacrificio del “desarrollo económico”.
[1] Declaraciones realizadas por el ministro de medio ambiente Ruben Ramirez en Tv Perú el 16 de noviembre del 2021.
[1] Pese a que este Plan Especial Multisectorial se construyó con la participación de todos los ministerios y la sociedad civil, aún se tiene el pendiente de que la Presidencia del Consejo de Ministros publiqué dicha política, esto debido a que el Ministerio de Energía y Minas – MINEM se resiste a acelerar el proceso.
[1] El detalle de este asignación presupuestal se encuentra disponible en: https://muqui.org/noticias/presupuesto-2022-aprobado-por-congreso-minsa-y-mef-priorizara-50-millones-600-mil-soles-para-atencion-a-afectados-por-metales-toxicos/
