Redacción DHSF
La reunión entre la Dirección Regional de Salud (Diresa) y representantes de las empresas mineras que operan en la región Cusco se desarrolló a puertas cerradas y se sabe poco sobre los asuntos específicos que se discutieron y los acuerdos que se tomaron.
Según la convocatoria, Diresa buscaba que las empresas se constituyeran en unidades epidemiológicas informantes, así como evaluar y verificar que sus planes de contingencia de prevención, control y vigilancia epidemiológica del COVID-19 cumplan con los lineamientos del sector Salud.
Diresa había mostrado su preocupación porque las empresas, principalmente Antapaccay, aplicaron pruebas de descarte del virus en centros médicos que no contaban con autorización ni certificación del Ministerio de Salud (Minsa) y sin conocimiento ni participación del Comando COVID-19 de Espinar.
La cita tuvo lugar en la sede de la Diresa de la ciudad del Cusco a media mañana del martes.
El presidente del Frente Único de Defensa de los Intereses de Espinar (FUDIE), Ricardo Carlos, sostuvo que pedirán a las autoridades que se informe los acuerdos de la reunión y expliquen a las comunidades campesinas de las zonas de influencia minera las acciones que se harán para evitar los contagios con coronavirus. «Vamos a pedir que se nos informe», dijo.
El gobernador regional del Cusco, Jean Paul Benavente, adelantó que se acordó que la empresa extractiva entregará 5 mil pruebas rápidas de descarte de COVID-19 aproximadamente. Estas, antes de ser aplicadas, serán validadas por especialistas de Diresa.
“El debate ha sido si se autoriza la posibilidad de que se apliquen más pruebas rápidas en Espinar y la mina está entregando cerca de cinco mil pruebas”, aseguró Benavente.
PRUEBAS CUESTIONADAS
En tanto, las pruebas rápidas, hechas por la minera Glencore Antapaccay a sus servidores están en cuestión, porque fueron mal aplicadas y sin conocimiento de los especialistas de salud.
El director del Hospital de Espinar, Ernesto Chuquihuayta, informó que las muestras aplicadas por las dos clínicas contratadas por Antapaccay y que confirmaron 8 contagiados, no fueron precisas. Hubo cuatro falsos positivos.
Chuquihuayta refirió que cuando practicaron muestras certificadas a los servidores de la minera solo confirmaron 4 personas con COVID-19. «Son casos positivos con IgG. Eso significa que están, así se puede decir, en fase no contagiante, porque están acabando de tener la enfermedad. En los otros 4 casos salió negativo», señaló el médico.